Puede que nos llame la atención mucha gente y por muchos motivos. Cuando conocemos a alguien, un mecanismo natural se pone en marcha dentro de nosotros que recoge la información que necesitamos para relacionarnos con el otro. Nos permite ir conociendo a los que nos rodea con la naturalidad que da el paso del tiempo —necesitamos relacionarnos con cierta frecuencia para que el camino del reconocimiento fragüe, o no, una relación u otra—. En ese reconocimiento podemos sentir todo tipo de emociones conjuntas que hagan de una relación inicial algo más profundo, sea en el campo que sea y sea con la persona que sea. No hay reglas, solo está, si acaso, el destino.
Pero, ¿qué sucede a primera vista? ¿Qué sucede cuando, por ejemplo, a un hombre le llama la atención una mujer como la del dibujo de abajo de RHADS?
¡Quizás le corresponda a Eros, en ese momento, hacerse cargo de la situación!
Abajo copio el discurso de Fedro en El Banquete de Platón:
Eros es el dios más anciano. Es el que hace más bien a los hombres, porque no hay mayor ventaja para un joven que tener un amante virtuoso, ni para un amante, que el amar un objeto virtuoso. Inspira al hombre la vergüenza del mal y la emulación del bien. Inspira valor, ya que «sólo los amantes saben morir el uno por el otro». En el alma del que ama hay divinidad. De todos los dioses, Eros es el más capaz de hacer feliz al hombre
JM