En ocasiones, la vida nos sorprende más allá de los límites de lo acostumbrado. Esos momentos suelen venir cargados de algún tipo de información que, bien equilibrado ese acontecimiento, se obtiene el premio de la experiencia, el conocimiento directo, lo que los telestai llamaban gnosis, el conocimiento directo a través del uso de la nous.
Esos momento no son muchos, más bien escasos, y claro no están para desperdiciarlos y seguir por la vida como si nada hubiera ocurrido. Son un regalo de la naturaleza, una conexión valiosa con la mente de Gaia. Seguir leyendo El cura frustrado
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